Las caídas se producen habitualmente por suelos resbaladizos, alfombras o escaleras. Además, procurar dejar suficiente espacio entre los muebles de forma tal que no obstaculicen la fluida circulación en el hogar.
Los juguetes tirados por el suelo son otro factor que se debe controlar para evitar este tipo de accidentes.
Impedir que camas, sillas, cajas o muebles queden bajo las ventanas, especialmente en dormitorios de niños.
Los resbalones en el baño, en duchas o bañeras, son la principal causa de lesiones. Tomar las precauciones para evitarlos realizando adaptaciones, colocando barras de sujeción en las paredes de la ducha, usando alfombras antideslizantes y ventilando adecuadamente la habitación.
Golpes
Los golpes en el hogar derivan de diferentes circunstancias. Dejar puertas de placares y cajones de muebles abiertos obstaculizan la normal circulación en los espacios y pueden provocar golpes con variadas consecuencias. Los niños y las personas mayores con problemas de movilidad sufren estas situaciones. En puertas vidriadas colocar bandas opacas que sirvan para identificar el cristal, de forma tal de evitar los golpes y la rotura del vidrio con la peligrosidad que ello reviste.
Electrocuciones
Los accidentes con electricidad son frecuentes y tienen diverso origen. Se recomienda siempre cortar la energía eléctrica al momento de hacer alguna reparación o instalación. No colocar lamparillas de mayor potencia que la indicada en los aparatos de iluminación, evitar las conexiones múltiples en los alargues para no sobrecargar los mismos. Al usar un nuevo aparato, antes de conectarlo verificar que está adaptado a la tensión de la red eléctrica. Es necesario tapar los enchufes para que los niños no tengan acceso a los mismos.
Asfixia
La asfixia, definida como una falla en la respiración pulmonar por falta de oxígeno en el aire o la imposibilidad de que éste llegue a los pulmones, puede tener diferentes orígenes. Entre otras causas se destacan:
- Falta de oxígeno en los baños por la presencia de estufas y calentadores a gas.
- Introducción de objetos por boca o nariz con diámetro superior al de las vías respiratorias (botones, bolitas, ojos de peluches, partes de juguetes, semillas o carozos).
- Uso de bolsas de plástico como capuchas o caretas en juegos de niños.
Se recomienda no instalar calentadores a gas en el interior de baños ni habitaciones con mala ventilación. Evitar que los niños jueguen y manipulen objetos pequeños o juguetes que puedan desarmar en piezas más pequeñas.
Ahogamiento
Las piscinas, bañeras y otros recipientes llenos de agua revisten gran peligrosidad si no están debidamente protegidos o controlados. No dejar recipientes con agua cerca de los niños pequeños y evitar que permanezcan solos en la bañera, vigilarlos cuando circulen cerca de lugares con agua. Proteger las piscinas con diferentes medidas de seguridad como cercos o redes.
Intoxicaciones